Por: Allison Estrella Parraga Gonzales
Mientras caminamos por las calles, observamos a personas platicando, comiendo, subiendo a un bus o simplemente sentados en una banca, pero hay algo que tienen en común: todos están en el celular. Nadie se despega de él; se ha convertido en una parte importante de cada uno. En los últimos años, las redes sociales han ganado popularidad gracias a su fácil acceso, facilitando la comunicación a cualquier hora y lugar. Si bien es cierto que las redes sociales son herramientas poderosas para ampliar nuestro conocimiento y comprensión del mundo, su uso excesivo puede tener consecuencias psicológicas, como la ansiedad y el estrés. Entonces, es aquí donde surge la pregunta: ¿Las redes sociales nos están conectando o aislando de la realidad?
El impacto en las relaciones interpersonales
De las 5000 millones de personas del mundo que usan internet, casi el 95% utiliza las redes sociales (Forbes México, 2023). Antes, las personas se comunicaban por cartas; ahora, con un simple mensaje por WhatsApp o Instagram nos conectamos rápidamente. Gracias a ello, podemos compartir momentos con nuestros amigos y familiares, e incluso mantener el contacto con personas que nos habíamos alejado. Sin embargo, las redes sociales están reemplazando la comunicación física: poco a poco vamos perdiendo nuestras habilidades para escuchar, interactuar y conectar emocionalmente. Por ejemplo, es común ver en una reunión familiar a todos las personas con su celular en la mano, ignorando quienes están presentes, y solo juntándose para la foto del “recuerdo”. Lamentablemente, hemos priorizado las conversaciones en línea, dejando de lado el valor de hablar cara a cara.
Los “amigos” en línea
Con la llegada de las redes sociales, la manera en que hacemos amigos ha cambiado: por medio de una solicitud de “amistad” es suficiente para conocer a diversas personas del mundo con fotografías y datos de sus cuentas personales. Si bien es cierto que esta forma de crear amistades, e incluso relaciones amorosas, han tenido éxito, no todas son verdaderas. “A veces el mantener contacto virtual mediante mensajes supone el encuentro con alguien completamente desconocido con el que conversamos, e inclusive, puede ser alguien que finja ser otra persona (…)”, expresa Elvira Gómez en el portal web Psicoactiva. La forma en que alguien se comporta a través de las redes sociales puede reflejar necesidades como la búsqueda de aceptación, ocultando su verdadera personalidad. A través de las experiencias físicas, podemos realmente conocer a la persona, y sumado al sentido del tacto, podemos transmitir información que no se puede hacer mediante una pantalla como emociones, afecto o ayuda, sintiéndonos más conectados y creando un vínculo real.
La salud mental en juego
Un estudio de la Universidad de Pensilvania descubrió que el uso elevado de Facebook, Snapchat e Instagram aumenta, en lugar de disminuir, los sentimientos de soledad (Escobar, 2024). El uso excesivo de las redes sociales puede generar que la persona pierda contacto con el mundo exterior, ya que, como pasa tanto tiempo frente a una pantalla, esta se convierte en su única interacción social. Esta necesidad compulsiva e incontrolable de estar conectado a las redes sociales conlleva un mayor riesgo de desarrollar el síndrome FOMO (Fear Of Missing Out) por sus siglas en inglés, que refleja la ansiedad de los usuarios por perderse de algo en el ámbito digital, lo cual incita a que revisen actualizaciones o respondan a mensajes, sin importar correr riesgos al conducir o perder el sueño por la noche. Esta adicción provoca que las personas se pierdan de actividades de la vida real que contribuirían a una mayor sensación de satisfacción y pertenencia.
El desafío de encontrar el equilibrio
El reciente informe realizado por el Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad de España (ONTSI) subraya una realidad innegable: “El internet y las redes sociales se han convertido en una faceta integral de la vida moderna, especialmente para las nuevas generaciones.” No obstante, debemos encontrar un equilibrio en nuestras vidas online y offline, ya que esta debe ser una herramienta, no un refugio. El primer paso es reconocer que estamos desarrollando una adicción, y luego trabajar para evitar llegar a este punto, ya sea estableciendo límites con horarios específicos para usar el teléfono, o incluso hacer una pausa digital durante un determinado período de tiempo. No debemos dejar de cuidar nuestra salud mental y relaciones personales, puesto que todo en exceso puede ser nocivo.
Hoy en día, pareciera que estar "en línea" es sinónimo de estar "presente", pero en muchos casos sucede todo lo contrario. Mientras compartimos fotos, historias o pensamientos, a veces dejamos de vivir el momento real. Es por eso que debemos tener un control sobre ellas. No se trata de rechazarlas, sino de aprender a utilizarlas de forma que nos beneficien, comprendiendo que debemos desconectarnos para reconectar con lo más importante: nuestra emociones y amistades verdaderas.
Las redes sociales no son enemigas por sí mismas, pero sin un uso consciente, pueden alejarnos de aquello que nos hace verdaderamente humanos.
Alonso, M. (2024, 10 de diciembre). No te soporto en redes sociales: por qué los amigos pueden caernos peor en su versión virtual que en la real. El País. https://elpais.com/smoda/bienestar/2024-12-11/no-te-soporto-en-redes-sociales-como-el-personaje-virtual-puede-enfriar-las-amistades-reales.html
Día de los Amigos de Internet: Una amistad más allá de las barreras culturales. (2023, 13 de febrero). El Comercio. https://elcomercio.pe/bienestar/crecimiento-personal/dia-de-los-amigos-de-internet-una-amistad-mas-alla-de-las-barreras-culturales-i-ventajas-y-desventajas-de-la-amistad-por-redes-sociales-noticia/?ref=ecr
Escobar, D. (2024, 2 de mayo). Uno de cada tres adolescentes sufrirá adicción a las redes sociales. Infobae. https://www.infobae.com/tecno/2024/05/02/uno-de-cada-tres-adolescentes-sufrira-adiccion-a-las-redes-sociales/
¿Qué causa la adicción a las redes sociales? Secreto revelado. (2023, 24 de abril). Red de Universidades Anáhuac. https://www.anahuac.mx/blog/adiccion-a-las-redes-sociales
Robinson, L., & Smith, M. (2024, 14 de agosto). Las redes sociales y la salud mental ¿Es adicto a las redes sociales? Helpguide.org. https://www.helpguide.org/es/problemas-de-la-adolescencia/las-redes-sociales-y-la-salud-mental